Soy veinteañera. Llevo 10 años siendo niñera de chicos de todas las edades. Ninguno mío. Aun así, las malas lenguas comentan que no tengo experiencia laboral y que soy demasiado joven para su empresa. Calculad.
Por eso he decidido escribir esto: He aquí mi Currículum Vitae o, como dice mi padre, mi Ridículum Vitae.
Nombre: María
Profesión: Periodista.
Ocupación actual: Niñera.
Edad: Veinteañera.
Experiencia: Llevo más de una década gestionando los sistemas de higiene (duchas, manos limpias), salud (jarabes, medicinas), orden (juguetes, habitaciones), trabajo en equipo (orden, juegos, comidas, deberes), ocio (parque, manualidades, entretenimiento), residuos (pañales), alimentación (desayuno, comida, merienda, cena y entre-horas) y formación (deberes, estudio) del personal a mi cargo.
Experiencia profesional (2008-Actualidad):
- Madre en prácticas en más de 15 familias, estancia en el extranjero incluida.
- A los 20 años amplío mi experiencia con un verano en Londres y 3 personas bajo mi responsabilidad.
- Gestión de recursos para garantizar una nutrición adecuada del personal a mi cargo.
- Organización de actividades para dividir el horario de forma equitativa entre la educación y formación del personal, así como del tiempo de ocio.
- Manejo de situaciones de crisis de todo tipo, desde personales y existenciales, hasta formativas y de recursos.
- Amplio recorrido en temas de responsabilidad civil, gestión de equipos y resolución de conflictos.
Habilidades adquiridas: Profesora, educadora social, socorrista, enfermera, malabarista, actriz, entretenitóloga, chef, cuentacuentos, duermeniñóloga y gestionadora de dramatitis y de cuentitis aguda.
Información adicional:
- Idiomas: Dominio en traducción e interpretación de ‘Bebé’. Y nativo en traducción de cualquier idioma bañado en lágrimas al español y/o catalán.
- Gestión de crisis.
- Comunicación y RRSS: Habilidades comunicativas (altamente tranquilizadoras) con progenitores vía whatsapp y/o llamadas telefónicas.
- Conocimientos técnicos: Uso de biberones, pañales, juegos de mesa, papillas, parques infantiles y todo tipo de juegos.
Puede que mi experiencia laboral en el campo para el que he estudiado 4 años en la universidad sea limitado (aunque no nulo, por cierto). Pero estos 10 años -y contando- de niñera deberían servir, porque es experiencia vital, perfectamente trasladable al mundo laboral.
Todo guarda relación con el modo en que presentamos la información ante los reclutadores. Por eso es tan importante saber hablar bien, para demostrar que sí valemos la pena como trabajadores.
De otro modo, ¿por qué se valora que en mi Currículo aparezca ‘una estancia en Londres como au pair‘, y sin embargo ‘ser niñera en mi barrio’ no adquiere valor alguno? No tiene sentido.
Con mi experiencia personal de niñera soy un claro valor empresarial para quien me contrate, digan lo que digan. Clic para tuitearY esto es aplicable a todas las personas que tienen una situación parecida a la mía, canguros, niñeras, au pairs y, sobre todo, aquellas madres que quieren reincorporarse al mundo laboral tras dedicarse unos años a sus hijos.
Que nadie nos convenza de lo contrario.
Fdo: María Ros
